* ATENCIÓN... UN GRAN REGALO.*

"El mejor regalo que podemos darle a otra persona es nuestra atención íntegra."

Richard Moss.

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Esto es una gran verdad. Poner atención es un gran regalo para quien lo la recibe pero más para quien lo da.

Para poder darlo íntegramente, es importante empezar por poner atención en nosotros mismos y en los que nos rodea dándonos ese regalo a nosotros.

Como ya hemos dicho, alguna vez…

“NO PODEMOS DAR LO QUE NO TENEMOS”.

Si la atención no está en una persona, no podrá darla a sí mismo y menos a los demás.

Es importante ser conscientes de lo que la atención representa para nuestra vida y la de las personas con quienes entramos en contacto.

Dar nuestra atención íntegra a nosotros mismos y a los demás es un acto de AMOR.

Poner atención es no sólo importante, sino radical en la Creación de nuestra Realidad.

Cuando se pone atención, las cosas funcionan porque se actúa debidamente para lograr los objetivos y eso permite que todo fluya en nuestras vidas.

Cuando no se pone atención, se cometen muchos errores y olvidos que alejan lo que se desea, se complica las cosas y muchas veces se acarrean problemas.

Si esto no se corrige a tiempo, la falta de atención puede ocasionarle a un persona pérdidas de diferentes tipos desde el trabajo hasta la persona amada.

La atención empieza por las pequeñas cosas, instrucciones sencillas, pequeños pasos que van creciendo y siendo más fáciles de concretar.

A una persona que no pone atención en las cosas pequeñas, no es buena idea confiarle algo mayor ya que un descuido u omisión de su parte puede traer grandes complicaciones.

Alguien disperso, no logra fácilmente lo que desea ya que no se concentra en sus objetivos.

Poner atención implica poner los 5 sentidos en determinada persona o asunto, viviendo así en el aquí y el ahora.

Viviendo así, nos facilitamos lo que realizamos concretándolo más rápido, ahorrando energía que podemos utilizar en otra actividad.

Al poner atención, nos regalamos conocimientos y descubrimientos de todo lo que nos rodea, nos regalamos colores, aromas, esencias, y vibraciones que de otra manera aunque estén ahí, no se perciben.

Poner atención a las personas que nos rodean nos permite una comunicación más profunda y comunión de ideas, pensamientos y sentimientos.

Donde ponemos nuestra atención, es donde realmente estamos. No importa si físicamente se está en un lugar, la presencia real está en donde se fija la atención.

En lo que se fija la atención es lo que se atrae.

Quien fija su atención en problemas y preocupaciones, en lugar de encontrar soluciones, los acrecienta.

Quien fija su atención en cosas negativas, eso atraerá a su vida que se verá envuelta en situaciones similares a las que puso atención.

Quien fija su atención en las cosas positivas de la vida, eso recibirá de ella.

Quien fija su atención en las cualidades y cosas buenas de las personas, eso será lo que ellas le envíen.

Quien fija su atención en DIOS, verá que nada le falta.

Finalmente hay una frase que dice…

“DONDE ESTÁ TU ATENCIÓN ESTÁS TÚ”

Y tú…

¿Dónde estás ahora?

Me encanta conocer tu opinión al respecto.

GRACIAS, GRACIAS, GRACIAS por estar aquí!!!

CON AMOR...

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