La manifestación de la misma es como un detector de humo que te está alertando de que algo está sucediendo.
A veces este aviso llega a tiempo y es cuando te puedes responsabilizar y hacer algo al respecto.
Pero si el aviso llega aparentemente tarde, siempre puedes hacer algo para cambiar tu realidad. Nunca es demasiado tarde.
Si el diagnóstico no es bueno, todavía estás a tiempo de responder de manera responsable y hacer las correcciones necesarias. La palabra incurable NO existe si tú decides que así sea.
Los pensamientos, sentimientos, creencias, actitudes, decisiones y elecciones que como sabemos son las herramientas con las que creamos nuestra propia realidad juegan un papel muy importante en cuanto a la sanación personal.
Si se tiene fe y la firme creencia de que se sanará, el cuerpo responderá mejor a cualquier tratamiento y así será.
Como ya hemos dicho, lo que se cree se atrae y lo que se teme también.
Si alguien cree que cierta enfermedad e contagiosa o el consenso lo dice, a veces es difícil romper con la creencia. Más no imposible.
Entrar en contacto con una persona que la padece, será dedición tuya contagiarte de ella o no. Es tu elección el crearla. La enfermedad contagiada por contacto es como cualquier otra enfermedad, inducida emocionalmente, también.
De las emociones, la que más produce enfermedades es el enojo y depende de donde sea alojado es el tipo de enojo y raíz de la enfermedad.
No estamos hablando de un enojo pasajero, sino de un enojo alimentado por mucho tiempo, a veces mezclado con odio, rencor o resentimiento. Ese es el que crea la mayoría de las enfermedades.
Para poder sanar realmente una enfermedad lo más importante es encontrar la raíz a nivel emocional y trabajar con ella hasta desaparecerla.
Si no se hace esto, la enfermedad permanecerá siempre latente y puede reincidir.
Para sanar una enfermedad, al encontrar la raíz es importante trabajar el AMOR y el Perdón.
Al Perdonar se libera al objeto del enojo, odio, resentimiento o rencor que puede ser la persona misma y con ello, se libera de la enfermedad.
El AMOR a uno mismo juega un papel muy importante ya que nos da la fuerza para sanar.
Muchas enfermedades tienen que ver con el enojo creado por falta de AMOR a sí mismos o por parte de los demás Otras son creadas para poner a prueba el AMOR de los demás.
El hecho de asumir la responsabilidad de la enfermedad que se ha creado sin culpar a los demás de ella, es el principio para sanar la enfermedad.
Nuestro cuerpo es muy sabio y si lo escuchamos podremos sanar cualquier enfermedad sin importar la etiqueta que ésta tenga.
Si al primer síntoma actuamos, podremos sanarlo sin problema.
Toda enfermedad implica un proceso para ser sanada y la duración del mismo varía dependiendo de cada persona.
Hay quien puede detectar el origen de la misma más rápidamente y hay quien puede trabajar a nivel emocional también más rápidamente.
Sin embargo, si un proceso lleva más tiempo es un gran aprendizaje que al final, cuando el cuerpo ya esté sano, habrá traído un gran crecimiento a quien lo ha vivido.
Toda enfermedad es una gran oportunidades de conocimiento, crecimiento y aprendizaje. Si se ve de esta manera, se lograrán mejores resultados.
Si pones en orden tus palabras, pensamientos, sentimientos, acciones, actitudes, creencias, decisiones y elecciones sobre diferentes aspectos de tu vida y sobre las personas que te rodean, desaparecerán o evitarás las enfermedades de tu vida.
No es necesario llegar a una enfermedad extrema si con tiempo se van arreglando los desacuerdos, los enojos, los odios, los rencores o los resentimientos.
Si en lugar de crecerlos, se trabajan para sanarlos, eso se verá reflejado en un cuerpo saludable. Y eso se convertirá en un Acto de AMOR para ti mismo.
Hace tiempo yo escuchaba que un doctor dio una estadística de que cierta enfermedad era común en determinado grupo de personas después de una avanzada edad.
Lo que la ciencia no ha dicho es que es una consecuencia lógica de años de enojo por parte de esas personas.
Si hace años se hubiera tenido consciencia del origen de las enfermedades, ellos no estarían pasando por esto.
Es por ellos que si te sienes mal, escucha a tu cuerpo, escúchate a ti mismo y verás donde estás atorado y lo que te llevó a manifestar la enfermedad, entonces…
Haciendo los cambios necesarios a todo nivel, físico, mental, emocional y espiritual, verás como tu cuerpo sanará y de forma definitiva.
Cuando logres comprender la razón por la que creaste esa enfermedad y trabajes en ello, la enfermedad dejará de existir.
Finalmente es por ello que LAZARIS afirma que…
“Ya no tendrás un método ni una razón para continuar creándola y por lo tanto comenzarás, tan lenta o rápidamente como estés dispuesto a “descrearla”.
Es así como puedes tener este impacto.”
Y tú…
¿Te haces responsable de lo que has creado en tu cuerpo y haces los cambios necesarios para “descrearlo” y desaparecerlo o lo dejas en manos de un médico sin hacer un trabajo interno?
Me encanta conocer tu opinión al respecto.
GRACIAS, GRACIAS, GRACIAS por estar aquí!!!
CON AMOR...
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